POLÉMICO PREMIO NOBEL A TEORÍAS DEL SUR BAJO EL LENTE DEL NORTE

¿Justificando el Neocolonialismo de Guerra Fría?

Un Premio Nobel que se esperaba desde hace años, pero que marca más que nunca la siempre viva polémica entre la economía clásica y la heterodoxa. Este año lo ganan Acemoglu, Johnson y Robinson (AJR de aquí en adelante) por su trabajo sobre las instituciones, que hemos presentado en varios artículos de este bello pasquín. Este premio es particularmente polémico porque estos señores lograron lo que parecía imposible: adecuar las teorías antisistema al formato del establishment. Obviamente, tales adecuaciones atacan la esencia misma de dichas teorías.

Todos sabíamos que este día llegaría, pues Acemoglu publica como si su vida dependiera de ello. Debe tener unos 50 “asistentes de investigación” para mantener ese ritmo. Además, su publicación Los orígenes coloniales del desarrollo contemporáneo es probablemente la más popular entre los economistas académicos, con más de 20,000 citaciones (la medida de éxito para quienes trabajan en ese ámbito).

Esa misma investigación que lo propulsó a la fama es la base de su teoría del desarrollo. A través de las libretas de los barcos invasores, midió la tasa de mortalidad de europeos en sus diferentes colonias. Luego, relacionó esa tasa con el desarrollo de cada uno de esos países hoy en día. Así, si los europeos no sufrían enfermedades y otros contratiempos, se quedaban a vivir y ponían “instituciones inclusivas”. Mientras que, si morían de malaria o lo que fuera, dejaban una pequeña élite a cargo de “instituciones extractivas”.

Obviamente, las instituciones coloniales de la periferia no son únicamente el resultado de la tasa de mortalidad europea, pues el “nuevo mundo” ya tenía sus propias formas organizativas. De hecho, AJR argumenta que con la llegada de Colón hubo una inversión de fortunas en los territorios: las sociedades ricas (incas y aztecas) empobrecieron, mientras que las pobres de cazadores-recolectores (EE.UU., Argentina) fueron reemplazadas y enriquecieron (¿?). Le invitamos a pinchar aquí para más información sobre la formación inicial de nuestras instituciones.

Luego, estas instituciones se habrían mantenido durante los últimos 200 años debido a la “persistencia institucional”, que se debería simplemente a que los políticos son quienes se favorecen de las instituciones extractivas, y ellos son también las únicas personas con el poder de cambiarlas. Justamente, AJR, unos años antes, había publicado su “modelo de transición política” (¡uh la lá, señor francés!), en el que básicamente ricos y pobres se ponen de acuerdo sobre la tasa impositiva, y si no lo logran, unos realizan revoluciones y los otros, golpes de Estado. Por esto no critico a Leonidas Iza.

Hacen el modelo matemático y simplificado, con suposiciones políticas irreales como la del votante mediano representando al 50 + 1 para explicar la lucha de clases, sin nunca nombrar el concepto, obviamente (articulo). Llegan a la INACREDITÁVEL CONCLUSÃO de que la desigualdad económica causa desigualdad política. En un experimento natural extremadamente interesante e innovador en Colombia (hay que reconocerles también, no solo criticar, jeje) muestran esta centenaria relación entre desigualdad política y económica (Pinche aquí para nuestro relato extendido).

Estos resultados nos llevan a lo que denomino la PARADOJA DE ACEMOGLU, pues la definición misma de instituciones inclusivas conlleva democracia, imperio de la ley, mercados competitivos y, además, DEFENSA DE LA PROPIEDAD PRIVADA. Sin embargo, su modelo de transición institucional concluye que la única manera de mejorar las instituciones en el largo plazo (los impuestos son reversibles) es un compromiso de redistribución CREÍBLE; propone una REFORMA AGRARIA, lo cual, a su vez, es contradictorio con la protección de la propiedad privada. O sea, para lograr instituciones inclusivas que protejan la propiedad privada, el primer paso es NACIONALIZAR Y REDISTRIBUIR LA PROPIEDAD PRIVADA.

Una de las pruebas de esta persistencia institucional sería que, hace 100 años, si ordenabas los países de América por riqueza, la lista sería la misma que hace 10 años. Sin embargo, eso solo prueba que los determinantes de largo plazo existen. Cabe recalcar que, hasta hace poco, Venezuela estaba en primera línea de esa lista, y hoy en día está en la última, teniendo de por medio justamente un cambio de régimen. Estos acontecimientos recientes refuerzan la teoría de Acemoglu, aunque veremos a continuación que no cuentan la historia completa como él pretende.

Reduccionismo

A pesar de que casi todo el Sur tiene en común el colonialismo europeo, los economistas rebeldes contextualizan las teorías de desarrollo conforme a la realidad de cada país o región. A diferencia de las teorías del Sur, cuya metodología adopta una perspectiva de materialismo histórico, que analiza toda la estructura social, cultural y económica de las sociedades, la economía clásica ABRAZA EL REDUCCIONISMO Y LA SIMPLIFICACIÓN (artículo).

Así, Acemoglu enamora al establishment reduciendo la crítica colonial a una simple regresión (que implica que existieron colonizaciones positivas), y creando modelos teóricos donde existe una única tasa impositiva que refleja meramente el nivel de redistribución. La política tiene un sentido únicamente económico a través del votante mediano, a pesar de que todos sabemos que se vota con el hígado (las emociones y el control mediático).

Por eso, desde los dependentistas latinoamericanos, pasando por Ha Jung Chan en Corea, y aterrizando en Europa con Mazzucato, se critica fuertemente que esta teoría omite las especificidades de cada contexto. Intenta dar una sola gran respuesta que aplica a todo el mundo como verdad absoluta, cuando ni siquiera se puede decir que sean las malas instituciones quienes causan el malestar económico y no al revés. Por eso encanta al Norte y repugna al Sur. De hecho, como reacción al libro de Acemoglu y Robinson Por qué fracasan los países, Pérez y Vernengo editaron una recolección de artículos llamándola Por qué fracasan los países Latinoamericanos (sí, el libro solo está en inglés, jajaja, gracias por la lucha compañeros). El nombre mismo es una crítica de AJR.

La hipótesis central de AJR asegura que es imposible que los políticos cometan los mismos errores una y otra vez, pues en un punto deberían aprender, por lo que la falta de crecimiento económico no puede ser producto de la INEPTITUD (obviamente no conocen a Lenin Moreno). El libro cuyo nombre en si es una crítica de AJR contraría esta suposición que aceptan como verdad a través del concepto de embeddedness; en Latinoamérica, cada vez que cambiamos de presidente, cambian todos los técnicos del sector público, por lo que no existe crecimiento del aprendizaje institucional. Dan el ejemplo del intento de Brasil de ser fabricante de computadores, donde políticas bien intencionadas igual fallaron. Cada institución busca reproducirse por lo que tendrá su propio modo de extractivismo, en Ecuador, por ejemplo, yo veo un modelo político altamente CLIENTELISTA (artículo).

Otra característica de la ceguera selectiva es que las excolonias prósperas económicamente, como Estados Unidos o Australia, tendrían instituciones inclusivas, a pesar de que allí se llevó a cabo un genocidio completo sobre los locales, a diferencia del mestizaje en Latinoamérica. Más allá de lo inadecuado que suena el término inclusivo para instituciones que llevaron a cabo esas prácticas, y que siguen llevándolas a cabo hoy en día en Palestina, vale recalcar que el reemplazo poblacional también es un factor.

No es secreto que la economía depende de la cultura, y es conocido que, según Weber, el capitalismo se implantó de forma mucho más feroz en países protestantes. Es decir, que podrían tener instituciones igual de extractivas, pero con una población mucho más propensa a individualizarse y mercantilizar todo lo que encuentran, agrandando así su PIB, la medida escogida por AJR. Otro día también explicamos la teoría de Emmanuel Todd, que señala que los sistemas políticos son consecuencia de los sistemas familiares.

Queda claro que, por querer abarcar demasiado y crear una teoría que explique el mundo entero, estos autores terminan cayendo en la excesiva simplificación de la historia, al punto que Milanovic tilda sus artículos de WIKIPEDIA CON REGRESIONES. Tal verdad absoluta no podía venir sin numerosas excepciones que obliguen a una ceguera selectiva, que detallamos a continuación.

La Ceguera Selectiva

Mientras en su famoso Por qué fracasan los países se ensañan con el ejemplo de Corea del Sur y del Norte, se critica su CEGUERA SELECTIVA ante la cuestión de China, el país que más sacó personas de la pobreza en este siglo, sin instituciones democráticas. Contradice toda su teoría, y AJR escoge simplemente no verlo. ¿Cómo puede ser que el factor más importante de prosperidad económica esté ausente en el país más próspero del último siglo si Acemoglu me dice que solo una democracia puede escuchar a sus ciudadanos?

De hecho, según Milanovic, esta teoría ni siquiera puede explicar los países comunistas, ya que su idea central es que la desigualdad política causa instituciones extractivas, lo cual causa desigualdad económica. Sin embargo, las instituciones comunistas tenían una alta desigualdad política, con una relativa igualdad económica. Tampoco define exactamente lo que son “instituciones extractivas”; simplemente, todas aquellas que obstaculizan la “prosperidad” capitalista de los países porque se dedican a mantener el poder de quienes las ostentan.

Yo llevo más lejos la crítica de esta ceguera selectiva, pues analiza las instituciones en total ausencia de un sistema-mundo a su alrededor. Ya en los 50, Kwame Nkrumah escribió un libro entero mostrando cómo funciona el neocolonialismo a través de canales financieros, culturales, tecnológicos y mentales. Los dependentistas latinoamericanos hicieron lo mismo con demostraciones constantes a través de estadística descriptiva. AJR agarró estas teorías, decidió obviar el camino y enfocarse en el punto de partida; lanzó una regresión econométrica, la única metodología aceptada por el Norte global, y con eso se disparó a la fama.

Así, AJR no incluye las interacciones globales dentro de sus modelos. Por lo que las instituciones de Ecuador responderían únicamente a su historia colonial y son sus factores internos los que no permiten su evolución debido a la “persistencia institucional”. Como si cada vez que Latinoamérica intentó una “transición política” que hubiera cambiado su “dependencia del camino” no hubiese habido un magnicidio gringo, acompañado de un golpe, y si llegase a fallar, de sus respectivas sanciones y aislamiento del mundo.

También asegura que los países prósperos y desarrollados son aquellos que tienen instituciones inclusivas, cuando las instituciones del tercer mundo están hechas a su imagen y semejanza. Quién diga que el gobierno de Estados Unidos no extrae todo lo que puede de su población, mientras su sistema la dirige claramente a la obesidad y drogadicción, obviamente está observando únicamente el PIB. A mi parecer, las instituciones del Norte son igual de extractivas, solo que mantienen la paz social en su territorio, socializando los beneficios de extraer del resto del mundo. Raro que genios como AJR jamás hayan mencionado que las instituciones interactúan internacionalmente también.

El Timing del Premio

No está de más remarcar que, a pesar de mis críticas, sí tengo admiración por estos autores, que al final popularizaron teorías del Sur con el propio estilo alienado que aprendieron en la universidad. El instrumento de la tasa de mortalidad a través de los cuadernos de los barcos siempre será mi preferido (por amor al arte nomás porque su medición institucional no tiene sentido), y obviamente, con la cantidad de trabajo de enorme influencia que han hecho, merecen el reconocimiento que se les da. Además, el Nobel no lo menciona, pero Acemoglu tiene abundante trabajo sobre tecnología y mercados laborales dignos de otro Nobel.

Sin embargo, el Premio Nobel no suele ser una coincidencia; no solo recompensa el trabajo, sino que se ajusta a las circunstancias. Y que justo este año se les condecore, es como veremos, servil a los intereses de siempre. Ya les dijimos la paradoja de Acemoglu, ahora su contradicción: ¿Si lo único importante son las instituciones y las instituciones son persistentes, pues quienes pueden cambiarlas se favorecen de ellas, entonces el desarrollo del tercer mundo es imposible? ¿Quién va a realizar la reforma agraria que necesitan nuestras democracias?

Así, este premio surge cuando sube la cortina de humo mundial y Occidente emprende una vez más una guerra económica por la libertad y la democracia. El único camino posible del desarrollo sería exportar las instituciones del Norte hacia el Sur, desconociendo por completo que el proceso de subdesarrollo en el Sur está íntimamente ligado al desarrollo del Norte, que sigue extrayendo riqueza y valor del Sur a través de instituciones globales y un sistema financiero que perpetúan la desigualdad y la deuda (artículo).

Esta narrativa se usa entonces como excusa para que Estados Unidos lleve democracia al mundo, ya que su camino institucional sería el único hacia esa especie de utopía que llaman prosperidad. Irónicamente, si bien AJR se hace famoso por mostrar la influencia de la colonización en las instituciones del mundo, hoy recibe un Premio Nobel para justificar las intervenciones neocoloniales de Estados Unidos en la periferia. Entregan el premio al Institucionalismo ahistórico justo cuando Occidente comete un genocidio por llevar democracia a los “bárbaros de Oriente” y detener la “sanguinaria dictadura rusa”, reescribiendo la historia día a día. Ni pareciera coincidencia que lo entreguen un día después de que las élites criollas festejen el DÍA DE LA RAZA por la llegada de Colón a América.

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Economista especializado en regulación de la competencia, con conocimientos variados en las diferentes temáticas de la disciplina: economía política, desarrollo, medioambiente, fiscal. Trabajé durante un año en una consultora financiera en Brasil (Fusiones y adquisiciones) y 4 años haciendo consultorías para CEPAL, además de una consultoría sobre salud mental y ambiente laboral en Chile, y otra de 6 meses sobre la historia del desplazamiento forzado en Mozambique para la London Bussiness school.

No solo entiendo los temas en los que me especializo, sino que trazo las diferentes relaciones entre ellos para tener una visión completa del panorama. Junto a eso, manejo bases de datos y softwares como Stata, asegurándome así que la narrativa y la estadística vayan de la mano. Hablo español, inglés, francés y portugués. Soy sociable, persistente, curioso, organizado, trabajo bien en equipo y bajo presión. Usted entrégueme un trabajo y yo seré especialista en el tema, pues siempre estoy dispuesto a aprender y me adapto a cualquier circunstancia, un día me encuentra haciendo presentaciones a altos funcionarios, al siguiente jugando fútbol en la favela.